Remil nunca llegó tan lejos. Esta vez se mueve en el peligroso filo de la actualidad política. Todos juegan frívolamente a la glorificación de los años 70, a la nueva resistencia peronista y a la revolución contra una dictadura imaginaria. Hasta que de pronto alguien se toma la ficción demasiado en serio y está a punto de desatar una tragedia sin retorno. En París, un amigo del Papa teme que este asunto le manche la sotana. Sabe que Francisco, afecto a meterse en las turbias aguas de la política argentina, bendice y alienta a personajes marginales que juegan con fuego. Por eso recurre a la Casita. Para que el coronel Cálgaris y Remil, su soldado más fiel, actúen en las sombras; esta vez al servicio secreto de Su Santidad. Jorge Fernández Díaz le da forma con su implacable pericia narrativa a un libro duro, sarcástico e inteligente. Una ficción políticamente incorrecta, demasiado cercana a lo real. Tanto que, en la lucidez extrema de su confección, se vuelve, por estos días, turbadora y a la vez indispensable.