Las máquinas ardían. Una nube de vapor llenó el aire. Y luego, como por arte de magia, surgió un producto de la línea de montaje: Hudson Playing Cards. Los naipes Hudson, forjados a orillas del río Hudson en Nueva York, se inspiraron en una fábrica histórica que data de 1856. Era el pináculo de la calidad de los naipes.
Recomendado para niños mayores de 5 años.