Los sánduches y los refrigerios en general han sido parte de nuestra dieta por años, son fáciles de preparar, muy muy ricos y se pueden hacer a gusto personal, con mucha proteína, con o sin vegetales, rebozados de salsas o sin ninguna, tan grandes que sirvan de almuerzo o pequeños para comer a mitad de la tarde. Mejor dicho, son ideales para cualquier momento y más cuando tienes una de las muchas sanducheras modernas que los hacen en minutos.

Como todos sabemos, las sanducheras son pequeños electrodomésticos con dos planchas, una arriba y una abajo, que calientan o tuestan el pan. Si bien están pensadas para hacer ricos sandwiches, en la actualidad han sumado nuevas características que las hacen perfectas para cientos de recetas.

Los modelos que encuentras en Pepe Ganga van desde la sanduchera 2 puestos más sencilla hasta una que incorpora grill para asar tu carne preferida. No obstante, la mayoría de modelos comparten algunos atributos como planchas antiadherentes para facilitar la limpieza, indicadores para saber que tu plato está listo y almacenamiento vertical para ahorrar espacio.

Si estás buscando una referencia de mejor gama, aquí puedes adquirir una sanduchera panini, las cuales destacan sobre las demás porque, como su nombre lo indica, están diseñadas para preparar paninis, una variedad de sánduches italianos que llevan pan ciabatta o roseta. Para carnes y hamburguesas también son recomendadas.

Ahora bien, una sanduchera grill es perfecta para ti si los asados nunca faltan en tu mesa. Se caracterizan por tener planchas más grandes y un ajuste de altura que permite preparar bocadillos de diversos tamaños y formas. Son las más apropiadas para hacer carne a la parrilla.

En el tope de la gama está la plancha sanduchera, que es básicamente un modelo 3 en 1, es decir, la más completa de todas. En ella puedes hacer sánduches, carnes, waffles, paninis, cocinar muchas clases de alimentos y vegetales. Son las más grandes y las más potentes.

Imagina todo lo que puedes hacer con las sanducheras que tenemos en Pepe Ganga, ¡compra la tuya ya!